sábado, 8 de mayo de 2010

Vida y pasiones de Giovanni Silveira – Capítulo I


- Nunca vas a estar-estar con ella si ni siquiera le has tocado la mano.

- ¿Qué tienen que ver mis manos con qué esté con ella?

- Simple, si ni siquiera la has cogido de la mano, ¿cómo mierda piensas que te creamos que estás con ella hace como un mes? Es en serio cholo, el otro día estaba hablando con Jenny, y me contó tu roche.

- ¿Seguimos hablando de lo mismo? ¿Cuál roche, huevón?

- El de la mano, tarado. Me dijo que él otro día estaba hablando con Maricarmen…

- Puta madre, ¿qué le dijo?

- Déjame terminar, estúpido. Si me interrumpes no te puedo contar ¿no? La cosa es que Maricarmen le dijo a Jenny que sí le gustas un montón…

- ¡Esa es, papi!

- Esa no es, idiota, hay más. Le gustas un montón, pero que no entiende porque hasta ahora no la coges de la mano. Y tiene razón, ya te pasaste de pendejo con eso de estar 1 semana sin hablarle porque no te habías dado cuenta que te había dicho que sí quería estar contigo cuando se lo preguntaste.

- No me jodas, ni siquiera la escuché. Recién hasta el sábado siguiente que me enteré que ya estábamos. Y ya de por sí es medio complicado vernos, con eso de que tenemos clases y yo tengo que quedarme a entrenar o ensayar danza, y encima todo el roche que es salir al paradero a esperarla todo idiota, con todo el mundo jodiéndote porque te quedas a esperar a alguien. Es demasiado molesto.

- Todo lo que quieras, Gio, pero no vas a negar que ya te pasas pendejo. Está bien que te arroches, le pasa a todo el mundo. Quizás a mi no tanto, pero a otros sí les pasa…

- Ya, payaso, no seas botado.

- Pero es la verdad. Llevas un huevo de tiempo atrás de Maricarmen. Puta, brother, llevas una vida creo, desde primero ¿no? Ya pues, no seas pendejo, si vas a estar con ella, y con lo templada que está ella de ti, por lo menos la mano le tienes que coger.

- Ya carajo, no jodas, le voy a coger la mano.

No era la primera vez que Giovanni recibía los consejos amorosos de Jorge. Ya en algunas otras ocasiones habían hablado del tema, como amigos. La verdad es que Giovanni, a pesar de ser uno de los más conocidos de su promo, de hablarse con casi todo el mundo, de parecer bastante conversador, no lo era. Le costaba hablar de su vida, le costaba abrirse con sus amigos más cercanos, y si tenía que hablar de temas difíciles, es decir, chicas, su primera opción siempre eran los mismos amigos suyos que tenían cierto contacto con las chicas del otro colegio. No es que no confiara en sus otros amigos, sino que con ellos era más cómodo hablar del tema porque sabían de quien hablaban y era más rápido hacer las explicaciones del caso.

La historia de Giovanni con Maricarmen venía desde que estaban en primero de secundaria. Giovanni Silveira, alumno de un colegio sólo de hombres había empezado a cruzar cartas con María del Carmen Rodríguez, alumna del colegio que estaba a un par de cuadras del suyo. En esa época se carteaba con otra chica, Janet Salazar, por quien, si bien sentía algo de vez en cuando, la consideraba más una amiga que cualquier otra cosa. Janet era la hermana de uno de sus amigos de la promoción, por lo que su amigo tenía que desempeñar las trabajosas funciones de mensajero de la promoción. Le llevaba las cartas a su hermana, su hermana hacía la entrega, leían la carta, hacían la respuesta, y Janet se la llevaba a su hermano para que entregara la respuesta. Todo un método postal bastante bien estructurado, ya que probablemente en un día normal, Carlos se podía llevar a su casa unas 4 o 5 cartas.

Giovanni tenía 15 años en la época que comenzó su historia de enamorado formal con Maricarmen. Era de una familia relativamente numerosa. Tenía 2 hermanas mujeres y 1 hermano hombre. Él era el último, o como le gustaba decir a su abuela, el conchito. Lo cierto es que se llevaba relativamente bien con su familia, pero tenía algo en claro, más familia eran sus amigos porque a ellos los había elegido. Sin embargo, no es que no quisiera a su familia, simplemente que no trataba de ventilar sus problemas personas con ellos, como sí lo hacen otras personas. Se había acostumbrado a ocuparse de sus problemas, de sus trabajos, de su vida en general, relativamente solo. No es que no necesitara de sus papás, porque alguien lo tenía que mantener, pero la tenía bastante clara: los problemas que pudiera tener eran suyos, así que él se encargaba de solucionarlos en la medida en que pudiera hacerlo.

Entranaba gimnasia bastantes horas al día, por lo que su dieta diaria era, a veces, escandalosa para algunos, y le gustaba bastante la música, no tocaba ningún instrumento, más por flojera y vergüenza de tener que pedirle a alguien ayuda para aprender que por otra cosa, pero cantaba bastante bien, por lo que solía juntarse con algunos amigos para ensayar y participar en actuaciones. Académicamente todo iba bien, excepto por unos pequeños inconvenientes actitudinales: si tenía algo que decir lo decía, así tuviera que gritarle al profesor por una decisión que creía injusta.

   

- ¿Vamos mañana al cine? –Le preguntaba Maricarmen a Giovanni mientras esperaban que viniera su carro.

- Ya, bravazo, creo que la semana pasada estrenaron Garfield, así que podemos ir a ver esa si quieres.

- Estaba pensando en otra cosa, una, no sé, más romántica –y era obvio que Maricarmen se había puesto roja mientras decía eso.

- Está bien –Giovanni se había demorado un poco en responder, no sabía muy bien que hacer–. Podemos ver la que tú quieras ver, en realidad, no importa cuál sea, va a ser chévere salir juntos, por fin.

- Sí, por fin –y era obvio que Maricarmen no sólo quería ir a ver una película romántica–. Vamos a poder estar abrazados un poco –y el tomate estaba nuevamente en su cara.

- Sí, supongo –Giovanni, haciendo gala de su tan común distracción, ya que no entendió para nada lo que Maricarmen trataba de decirle–. Aunque debe ser incómodo ¿no? Porque esos asientos del cine son todo duros con los plásticos esos para poner la gaseosa que no te dejan acomodarte bien. Si quieres podernos ir a ver la película en mi casa porque…

- ¡Ya! –y esta vez Maricarmen lo dijo tan de golpe que hasta Giovanni pudo entender que algo había por ahí–. Está bien, ¿pero no habrá problema con tus papás?

- No creo que estén la verdad. Los suelen salir a visitar a sus amigos y llegar un toque tarde, y mis hermanos lo mismo, como ya son mayores, suelen salir los sábados todo el día. Los sábados son bastante cómodos porque tengo la casa para mi… –y ahí fue cuando Giovanni se dio cuenta de lo que eso podía significar.

- Ya entonces, entonces el sábado en tu casa. ¡Uy! Ya viene mi carro, me voy –y se dan un beso en la mejilla.

Hubiera sido una despedida típica y sin problemas, si no hubiera sido por un oportuno grito…

- ¡Dale su agarre, huevón! –cortesía de Jorge.

Maricarmen sólo se subió a su carro, mientras que Giovanni se ponía rojo, y cruzaba la pista con todas las intenciones de ir a golpear a Jorge. No es que Giovanni fuera una persona muy agresiva, sus momentos más agresivos eran los deportivos, cuando se daba ánimos a si mismo, o cuando alentaba a sus amigos en otros deportes o cuando se iba a ver al Muni con su papá y sus hermanos.

Giovanni iba con todas las intenciones de reclamarle a Jorge por lo que gritó, sin embargo, se dio cuenta de algo. Era cierto. Había pasado casi un mes desde que estaba con Maricarmen, y recién hace una semana la había tomado de la mano, pero en todo ese tiempo, si es que había habido un pico inocente mientras se despedían era decir bastante. Terminó por no decirle nada a Jorge. Pasó con cara de molesto a su costado, sin decirle nada ni siquiera a los otros chicos que estaban ahí con Jorge riéndose, y se fue a su casa caminando, como siempre. Todas las 5 cuadras de camino a su casa fueron un solo pensamiento: "voy a tener a Maricarmen en mi casa, el sábado, cuando no hay nadie". Y si cualquier otro chico de su edad hubiera pensado ese momento como el más preciso para estar con una chica, Giovanni pensaba todo lo contrario, porque no tenía ni la más mínima idea de qué era lo que tenía que hacer.

5 comentarios:

  1. mingoo!!!
    vi esto en fb e imagine q estaria en tu blog!!!!...
    no entiendo! exijo explicaciones... estas escribiendo una novela?? oq??? esta chevre ah! :D
    aver si me explicas un poco tus proyectos :D

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  2. Más o menos... es como que la historia de un pata que le pasan muchas cosas... pero no sé que tan regularmente lo escriba porque ni siquiera tengo planeado lo que sigue ni cómo acaba... :)

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  3. ooohh.. y.. esta inspirado en una historia real? o es todo producto d tu imaginacion? :D

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  4. Algunas cosas sí otras cosas no... cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia :)

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